Una prometedora generación serbia que no termina de carburar

Que el fútbol serbio está resurgiendo de sus cenizas no es nada nuevo. O al lleva queriéndolo hacer durante lustros. Son ya varios los años en el que asoman numerosos talentos de nivel muy interesante, pero el equipo parece no funcionar de forma satisfactoria. Hace tiempo que no logran conformar una selección suficientemente competitiva. Recordemos que es un país de donde han salido talentos de la talla de Savicevic, Mijatovic, Djukic, Milosevic, Stojkovic o Jugovic, entre otros. En la actualidad disponen de un grupo de futbolistas muy por encima de la media, pero siguen sin dar ese paso adelante que se antoja necesario. Incluso parecen haber retrocedido con respecto a tiempos recientes. Anteriormente al menos se clasificaban para Eurocopas.

Radomir Antic tampoco parece ser la solución para que la selección serbia rinda a los niveles que se espera, al menos por lo demostrado frente a Francia. Planteó un partido cuya característica más visible era la racanería, con 10 jugadores de campo defendiendo y Pantelic actuando como "isla". Dejó el terreno y la bola a un equipo cuyos problemas en la creación son más que evidentes, Gourcouff era el único de realizar cosas distintas en zona de creación. La única vía para el gol por parte serbia parecía ser el contraataque o una jugada de estrategia. Una lástima, ya que creo que es un conjunto al que se le puede sacar mucho más jugo. Así no extraña que Francia se acabara imponiendo, sin dominar y sin fluidez. Tan sólo al final y a balón parado fueron capaces de recortar distancias. Pero ni tan siquiera cuando el equipo necesitaba imperiosamente el gol Antic fue capaz de arriesgar y tirar las líneas hacia delante.

A este grupo hay que exigirle más, porque corre el riesgo de perderse en la mediocridad. En esta selección ni tan siquiera Vidic se asemeja al central dominante que estamos acostumbrados a ver en el Manchester United. Para mí, junto a Skrtel y Carvalho, el mejor del mundo en su demarcación. Una de sus principales virtudes es que jamás se complica la vida, pues en el partido de ayer lo hizo en más de una oportunidad. Lo cierto es que Krstajic tampoco ayudó en exceso, otro pedazo de central, que no parece estar en su mejor momento de forma. El rendimiento y la confianza de Stojkovic está siendo espectacular en las últimas semanas, sin lugar a dudas se trata de uno de los porteros más en forma del panorama actual. Branislav Ivanovic es uno de los defensas de mayor nivel del mundo, aunque se equivocó escogiendo al Chelsea en lugar de la Juve. Dusko Tosic es un central delicioso que cumple como lateral izquierdo, sin embargo es cierto que tiene bastantes "agujeros" como jugador. Kuzmanovic es un gran futbolista de equipo que debe ganar galones. Dejan Stankovic no se encuentra en su mejor momento pero siempre aporta veteranía y trabajo oscuro. Gojko Kacar es el futbolista "polifuncional" por excelencia, realmente prometedor -tengo preparado un artículo especial sobre él que publicaré dentro de poco-. Extremos habilidosos y veloces aunque irregulares como Zoran Tosic, Krasic o Sulejmani siempre se antojan necesarios en cualquier equipo. Nikola Zigic es un delantero ideal para facilitar la llegada desde segunda línea del equipo (Bosko Jankovic, Kuzmanovic, Kacar + extremos). Otros puntas como Lazovic o Pantelic siempre aportan su inestimable trabajo en beneficio del equipo, además de ser goleadores decentes. Smiljanic es un futbolista ideal para realizar trabajo oscuro y facilitar la salida del balón. Rukavina y Kolarov son laterales de marcada tendencia ofensiva que pueden resultar muy útiles para el equipo. Como ven, hay base para por lo menos intentar hacer un mejor fútbol. Por supuesto, también para conseguir mejores resultados. Y lo que es más importante: la mayoría de ellos son aún muy jóvenes. Es cierto que quizá carecen de ese futbolista diferencial, sobretodo en el apartado ofensivo. Pero es un conjunto que si consigue unión plasmada sobre el césped y mayor fluidez, entusiasmo y descaro puede hacérselo pasar muy mal a cualquiera. Como mínimo. No deberían dejar escapar estas generaciones.

Fotos: www.elpais.com, www.betshrink.com