Alemania espera a su "hornada del 89"

En los últimos años la selección alemana ha pasado una "travesía por el desierto" si nos referimos al talento. Y es que no se vislumbraba una generación de futbolistas capaz de suceder a los "veteranos de guerra" contrastados. Poco a poco parece que el fútbol vuelve a fluir por el país alemán y la aparición de nuevos talentos se está sucediendo, y cada vez de manera más frecuente.

Sobre todo esperan impacientemente a la "hornada del 89". Desde que los viera en el Europeo sub17 del 2006 me quedé prendado de algunos (varios) de los futbolistas que integraban aquel equipo. Y eso que sólo pudieron quedar cuartos en el campeonato global. E imagino que en el país germano también tendrán depositadas muchas ilusiones en estos chavales. En esta ocasión no voy a empezar rememorando al equipo línea por línea, sino por mi orden de preferencia. Allí estaba el completísimo y dinámico lateral izquierdo David Vrzogic (Borussia Dortmund), que dio clases de cómo defender y cuando incorporarse al ataque. Su futuro está en la selección absoluta, estoy completamente seguro. También sobresalió de manera especial el mediocentro Lars Bender, que ya está disputando sus minutos con el 1860 Munich, un futbolista muy vertical, de buena técnica individual y con una capacidad innata para oxigenar el juego del equipo. El centro de la zaga formada por Florian Jungwirth y Christopher Schorch fue prácticamente infranqueable durante todo el torneo, donde les dio tiempo a demostrar que tienen nivel para llegar a un equipo de primer nivel. Además se complementaban a la perfección, mientras Jungwirth era más contundente, rápido y duro, Schorch poseía mejor juego aéreo y capacidad para dar salida al balón. Merece también una mención como destacado el goleador Manuel Fischer, delantero centro puro con un especial olfato para el gol y capaz de rematar a portería de cualquier forma y en cualquier lugar, no exento de trabajo en favor del equipo. O el elegante mediapunta Toni Kroos, que dejó constancia de su buen trato del balón, aunque le faltó ser más incisivo y asumir más responsabilidades. Otros que también dejaron muestras que pueden llegar fueron el técnico aunque irregular extremo derecho Timo Gebhart, el "regateador" extremo pero poco productivo Marko Marin, el duro y sacrificado mediocentro defensivo aunque algo pobre técnicamente Sven Bender, o el voluntarioso y enérgico pero superable lateral derecho Bjorn Kopplin. Gran equipo el que conformaron, darán que hablar. Lo cierto es que no se vislumbra ningún "proyecto de crack" como ocurrió en el caso de España con Bojan Krkic o Aarón Ñíguez, pero sí parece que de aquí pueden salir muchos y muy buenos jugadores. No les perdamos la pista.

Ni mucho menos la "hornada del 89" es la única que apunta alto, ahí están otros jóvenes pero contrastados futbolistas como el genial y móvil punta Lukas Podolski (1985), el "todocampista para todo" Bastian Schweinsteiger (1984) o el sobrio mediocentro Andreas Ottl (1985). También habrá que prestar especial atención al completísimo delantero Marcel Heller (1986); o al polivalente, enérgico y agresivo centrocampista Kevin Boateng (1987); y al dinámico, versátil y técnico Gonzalo Castro (1987); sin olvidarnos del polivalente y "chisposo" Roberto Hilbert (1984); o el poderoso lateral izquierdo Marcell Jansen (1985). Y los que me dejo (Polanski, Kruska, Heppke, Dejagah, Neuer, Matip, Delura, Hunt, Gómez,...).

Por el bien del fútbol, que volvamos a ver a una gran selección alemana. Ganaremos todos.

Fotos: www.uefa.com