Damos espectáculo

Tres golitos. Posesión del balón. Cero ocasiones de gol... derrota contundente frente al Athletic, que no ha tenido que hacer mucho para ganar holgadamente a domicilio. Ya estoy cansado: siempre la misma historia. Me da la impresión de haber sufrido un "flashback" porque tengo la sensación de que siempre ocurre lo mismo. Decepción tras decepción, reflejo de un equipo sin alma. Se busca un lateral izquierdo y un mediocentro de características ofensivas... pero lo que el equipo necesita es un defensa central como el comer. Alexis está lesionado por un largo periodo y tanto Albiol, como Marchena -al que prefiero de mediocentro-, como Caneira y como Helguera son de aptitudes similares: más líberos que marcadores, sufren cuando el rival les encara en uno contra uno con espacios y no son expertos en la marca individual -suelen cometer muchas faltas y "comerse" muchos movimientos de los rivales-. No se entienden entre ellos.

Partido mediocre del Valencia de Koeman y el vendedor de motos Bakero, dominio de balón intrascendente y las ocasiones claras para el rival. Gol de Yeste en el 32` mediante una magistral falta al borde del área. El segundo en el 60` tras gran centro de David López por la banda derecha, y el tercero y último en el descuento en remate de otro centro desde banda derecha. Los dos de Fernando Llorente.

Dibujo del Valencia: 4-4-2. Escasa intensidad de los futbolistas y mucha lentitud a la hora de elaborar la jugada. Tan sólo estaba el recurso de las subidas de los laterales para intentar hacer algo en ataque, sólo se ha intentado por bandas. Falta de conexión entre el centro del campo y la delantera, que no ha tenido prácticamente ni una ocasión de gol. Deficiente repliegue defensivo donde los hombres de banda ni los mediocentros ni los puntas han ayudado lo que se requería de ellos. Y una actitud de los futbolistas de "necesita progresar". Sin cambio de ritmo, sin desmarques, sin apoyos y continuaciones, apenas unas cuantas paredes. Lo cierto es que hasta el gol del Athletic el equipo tampoco daba una mala sensación -tampoco buena- pero a partir de este suceso el partido ha dejado de existir. Incapaces de reaccionar, no hay nadie que se eche el equipo a las espaldas. Cualquiera diría que están pensando en otras cosas...

Cuánto se echa de menos los meses de aguantarnos... aunque ya es hora de romper con el pasado. Y el primero que debería salir por su fracaso estrepitoso es el deplorable presidente. Hasta que no se marche seguiremos sin proyecto, con parches, mucho dinero malgastado,... y sin ni tan siquiera pelear por algún título. Renovarse o morir: para equipo conformista ya tuvimos el Valencia de los 80 y principios de los 90. Ganar a Madrid y Barcelona jamás puede volver a ser nuestro único objetivo para considerar que se ha hecho una buena temporada.

Foto: www.sport.es