Nigeria sub17, exigencia física máxima y juego explosivo

El nigeriano es un conjunto que no se caracteriza por tener muchos hombres destacados pero que sabe sacar provecho a su superioridad física y que a la mínima ocasión golpea al rival dejándole con escasa capacidad de reacción.

TÁCTICA: 4-4-2

ONCE TIPO: Ajiboye; Mustapha Ibrahim, Balogun, Udoh, Isa (Amodu) ; Alfa (Osanga), Rabiu Ibrahim, Haruna (Joshua), Edile; Oseni, Chrisantus

FUTBOLISTAS CLAVES:

Rabiu Ibrahim, calidad en el centro del campo

Sin lugar a dudas el mejor técnicamente de su equipo, puede actuar tanto en la demarcación de mediocentro como de mediapunta. Es un zurdo habilidoso y con gran regate poseedor de una excelente visión de juego y un preciso toque de balón. Muy capacitado para la distribución, le falta algo de presencia.

Macauley Chrisantus, inteligencia en posiciones de arriba

La referencia arriba de Nigeria, es el máximo goleador del campeonato. Muy complicado de marcar, sabe moverse sobre el terreno de juego de forma muy inteligente y protege muy bien el balón con su cuerpo. Alto, fuerte y de potente zancada, se fabrica ocasiones de gol como pocos.

Otros como Ganiyu Oseni, Lukman Haruna, Matthew Edile o Yakubu Alfa también pueden hacer daño.

FILOSOFÍA DE EQUIPO:

La selección nigeriana es un conjunto al que le encanta empezar muy fuerte cada partido, con un derroche físico espectacular en los primeros treinta minutos de partido donde intentan hacer la diferencia, pueden mantener ese ritmo durante los noventa minutos. La mayoría de sus futbolistas son fuertes, rápidos, altos y con mucha resistencia, por lo que son capaces de ganar gran cantidad de balones por mayor ritmo más que por calidad individual. Además juegan como equipo a la hora de defender y en cuanto recuperan el balón no dudan en salir rápidamente a la contra y con muchos hombres. Se repliegan bien aunque retrasan demasiado sus posiciones a la hora de defender dejando el centro del campo libre en muchas ocasiones, ésto es algo que sin duda debería aprovechar España para elaborar el juego con criterio e intentar hacerles daño. Sus laterales no son grandes defensores por lo que abriendo el campo habría muchas más posibilidades de hacerles daño que jugando con interiores, aunque es cierto que sí suelen recibir ayudas de los extremos por lo que la aportación activa de los laterales españoles en ataque podría ser un buen arma para solucionar esto. Sus centrales se compenetran bastante bien y son fiables aunque suelen jugar con la línea demasiado retrasada por lo que desmarques de rupturas, intentar sacarlos de su zona o llegadas de segunda línea les podrían hacer mucho daño. Además de ser superiores a España físicamente llegan mucho más enteros (no han disputado ni una prórroga en todo el campeonato) y hacen uso de rotaciones, la mejor solución para la selección española ante esta clara desventaja debería ser tener más posesión de balón, con intención de hacer daño, pero sin pérdidas tontas que hagan trabajar el doble. Ante este tipo de selecciones siempre es preferible un disparo a puerta desde 40 metros (aunque se marche muy desviado) que una pérdida por no haber encontrados huecos. También creo que sería aconsejable menos conducción de balón por parte de los jugadores españoles y más circulación rápida/primer toque.

Fotos: www.fifa.com